Si mides no innoves. No podemos innovar por ti.


Durante estos días hay bastante gente que me ha solicitado el test básico para conocer el Business-Time de su empresa. Cuando vaya teniendo resultados podremos hacer un resumen. Anónimo, claro.

Muchas personas me preguntan ¿Cómo medirlo? y observo su entusiasmo en "medir y medir" absolutamente todo. Siempre nos da más seguridad tener todo "bajo control" y ya os puedo anticipar que pretender medir el business-time de forma estricta y permanente, es inadecuado.

El business-time model, BTM, se basa en una serie de mediciones CUALITATIVAS. Por tanto no es 100% objetivo, porque el futuro no es objetivo, ni las acciones son predecibles. Por ejemplo, no se cuentan "el número de mujeres que han promocionado a cargos intermedios" sino "la calidad de las promociones de mujeres a cargos intermedios y el cambio que éstas han incorporado a ese cargo en concreto". Mientras que lo primero es un simple número que satisface a RRHH, lo segundo es una apuesta por la innovación y el futuro.

Estos dias he visto reforzada esta opinión, que es polémica lo reconozco, después de leer la entrada de Tom Peters en su blog titulada "Told you so!". En ella pone ejemplos claros de grandes compañías que se han obsesionado en conceptos interesantes como "Six sigma", pero que los han llevado al extremo. La medición cuantitativa lleva a la mejora y reducción de costes pero ahoga la creatividad y por consiguiente, la innovación.


Esto ocurre en numerosas empresas, faltas de innovación pero entusiasmadas por los resultados empresariales a corto plazo. Las empresas están llenas de "medidores", dirigentes obsesionados por el control y los números, por la reducción de los costes, por la mejora de los procesos. No quiero decir que esto debería de olvidarse, no. Lo que deberían haber es un equilibrio. Los extremos no son buenos y cuando se habla de medir todo lo medible-que es mucho- en una organización, puedes presentar numeros impresionantes, pero en el backstage, en la parte de atrás, lo que no se ve, tienes una organización frenada, atemorizada por cumplir estúpidos objetivos endemoniados y sobre todo, personas desmotivadas a la hora de crear nuevos conceptos y que están ansiosas por reinventar la empresa.

Mejora no es igual a innovación. Mejorar no es innovar. Reducir costes no es innovar, es reducir costes. Mejorar procesos no es innovar, es mejorar procesos. Y es importante, tanto reducir los costes absurdos, irrelevantes u ocultos como mejorar los procesos de la empresa. Pero que no hay que confundir con innovación. Por eso, las empresas que durante estos años han aplicado estrictas medidas de control, han mejorado sus resultados, pero han olvidado su futuro. Y es que el futuro es innovación.

Revisar el pasado para mejorar el presente, estanca tu futuro. Hay que revisar el presente para mejorar tu futuro. Olvidate del pasado.

El business-time model pondera y le da más importancia a la innovación disruptiva que a la mejora de procesos. Lo siento, no soy un fanático de la medición, de los cuadros en excel llenos de metricas, de los voluminosos informes sobre la mejora de la calidad o de los procesos de fabricación. Lo que necesitan las empresas son MÁS innovadores, provocadores, iniciadores, emprendedores, personas libres que aporten su creatividad y su visión y MENOS burócratas, medidores, examinadores, controladores y calificadores.

¿Tu empresa, mide o crea? Según comenta Peters, 3M, una de las empresas más innovadoras de todos los tiempos, ha perdido su rumbo innovador. En el ranking 2007 de las marcas más valoradas, ¡¡no aparece en las primeras 100 !!!. ¡¡En la lista del Fortune 500, está el número 97 !!. es verdad está subiendo respecto a años atrás pero en 1995 estaba en el puesto 58. Eso sí, su ratio actual de beneficios sobre ingresos es de un espectacular: 16,8 %. Pan para hoy y hambre para mañana.

Mide lo necesario e innova cada día. Una mezcla de estos ingredientes te da un cocktail ganador.


Danos tu comentario