La vida-videojuego del becario


Ayer tuve la suerte de mantener una distendida reunión con Elena Mercader, Directora de comunicación de Universia, la fundación del Banco Santander. El motivo de la misma era la presentación del Blogbook, el libro conjunto escrito por 70 autores de forma colaborativa, y ver las posibilidades para promocionarlo desde esa fantástica plataforma que es Universia, pues engloba en su red a 985 universidades iberoamericanas.

Me acompañaba Leo Borj, autor-participante en el libro, que está realizando una labor excepcional de coordinación de los textos que recibimos. Además, nos juntamos tres EXMBA del IE, con lo que comentamos con nostalgia nuestros momentos Beers&Casos del Insituto de Empresa, excepcionales reuniones de brainstorming. Fue una reunión muy enriquecedora y amena. Pudimos concretar aspectos relacionados al libro y es grato saber que nuestra iniciativa es un referente para proyectar la importancia de la nueva revolución social que se está produciendo.

Además la conversación fue ramificándose por el mundo de la universidad y de la empresa, y Elena nos contaba cierta situación que se producía con los jóvenes de hoy y que comento a continuación.

Entre las numerosas funciones que lleva a cabo Universia, está la actuar como intermediario entre empresas y universidades para la contratación por parte de las primeras de alumnos recién titulados o en su último año de carrera para ir desarrollando prácticas remuneradas en empresas. La red de oportunidades, como dicen en Universia, que deriva de la red de universidades es tan amplia que muchas empresas utilizan a esta red como herramienta de búsqueda de talento.

Sin embargo, las empresas se están encontrando con un escollo complejo de salvar cuando se enfrentan "face to face" con los candidatos: su motivación para desarrollar el trabajo como becarios o en prácticas. Muchos jóvenes no quieren trabajar si no es cerca de su domicilio, en condiciones muy ventajosas y en horarios adecuados. Y lo dicen abiertamente. Esto, desconcierta a las empresas que no encuentran fácilmente personas para cubrir puestos de becarios. Estas becas son excelentes oportunidades para el recién (o casi) titulado pues les proporcionan las prácticas imprescindibles y supone un banco de pruebas para las empresas a la hora de incorporarlos posteriormente.

Leo tuvo una frase genial, que reproduzco aquí: "algunos chicos se piensan que la vida es un continuo videojuego". Me encantó el símil. Como si fueramos veteranos de edad avanzada, contábamos nuestras historias del pasado cuando, como mucha otra gente, realizamos nuestras prácticas de carrera. Porque casi todos hemos sido becarios alguna vez.....

Yo recordaba cómo tenía que utilizar dos líneas de metro y un par de autobuses para llegar a una empresa de inversiones en Aravaca. Por supuesto, prácticas no remuneradas y haciendo de todo para todos. A los demás les había sucedido algo similar. Entonces, ¿ Qué está pasando? ¿De quíén es la culpa de este videojuego? ¿De los padres y de familias protectoras que han comprado a sus hijos una consola de seguridad absoluta? ¿ De las universidades que potencian la imagen de que todos los videojuegos son iguales? ¿De la empresa donde la etiqueta de videojuego interminable y aburrido ha sido extendida hasta el infinito? ¿De los propios jugadores de este irreal videojuego?

Recuerdo un artículo que me envió Economía Forense hace algunos meses, escrito por Iñaki Garay, Director de redacción de Expansión. En él, indicaba que (resumido):

"Antes era el candidato el que ponía todas las facilidades para ser contratado. Ahora, es más bien al revés. Quieren conocer sus derechos antes que sus deberes. Este exceso de autoestima, conduce directamente a una falta de compromiso, que es, con toda seguridad, uno de los déficits más importantes que puede tener a corto plazo la sociedad española."

En mi opinión, volvemos a la pirámide de maslow, hoy más famosa que nunca. La sociedad y la familia han logrado cubrir con creces las necesidades básicas de la persona con lo que su punto de partida es más alto del que era para nosotros e infinitamente más alto de lo que era para nuestros padres.

En este contexto, lo que toca es proporcionar un acercamiento de las motivaciones. Existe una evolución que no debe frenarse, pero debería contenerse. El papel de la universidad y del entorno familiar es imprescindible, pero aún así, la empresa tiene que tener resortes suficientes para girar la dirección de sus políticas de gestión de personas.

La adaptación de las empresas a los jóvenes no es claudicación, tiene que ser de entendimiento. El trabajo de captación de talento es diferente al de consolidación del mismo dentro de la organización. La búsqueda de la motivación es casi individual. Así es el entorno y las empresas deben de entender que esta generación de videojuego es así. Ni son mejores, ni peores. Tan sólo diferentes. La integración de cada individuo en una organización se consigue mediante la adaptación mutua. No se trata de conseguir clones. Muy al contrario, se pretende conseguir diversidad e iniciativa. Ahí se enriquecen ambas partes.

Las empresas deben adaptar sus estructuras a la generación 2.0 y la 3.0 que viene. En un mundo donde Google es el rey, ellos quieren las cosas para ya. El futuro no se planifica. El presente se vive. Y al igual que nosotros fuimos rebeldes con alguna causa, la nueva generación y las que vengan tendran su rebeldía.

Y como colofón, la anécdota del becario que al invitarle a que preguntara alguna duda planteó:

- Si, yo quería saber si es posible venir a trabajar en pantalón corto en verano y también si tienen una sala para jugar a la consola en los ratos libres.

La entrevistadora negaba con la cabeza mientras escuchaba al joven lamentarse:

- "¡ jo...., es que no se puede hacer nada de nada!

Lo dicho, una reunión de lo más interesante.
Actualización:
Ante los comentarios recibidos hasta ahora al post, quiero aclarar que las empresas deben adaptarse a las motivaciones lógicas de los jovenes becarios y ofrecerles las herramientas necesarias para un beneficio mutuo, buscando compromiso por ambas partes. Las prácticas remuneradas bien utilizadas son una herramienta fantastica para un primer contacto con el mundo laboral. No estamos hablando del primer empleo. Esta entrada se refiere a las prácticas en empresa y las becas.


12 Comentarios:

Anónimo dijo...

Aceptaría tu punto de vista si no fuese por una falacia. En realidad las empresas no buscan "nuevos talentos", sino "nuevos esclavos".

Jornadas laborales que no respetan los horarios de salida, sueldos rozando el mínimo establecido por ley, horas extras impagadas, realización de tareas muy por encima de su categoría...

Los profesionales maduros no aceptan vuestras condiciones y por eso recurrís a becarios que hagan el mismo trabajo por cuatro duros y poder sustituirles cuando exijan mejores condiciones.

Además gracias a las campañas del gobierno, os sale casi gratis despedirlos y obtenéis subvenciones por los nuevos jóvenes contratados.

Esto no pasaba antes, cierto. Ahora los jóvenes ya no son tan ignorantes y manipulables.

Anónimo dijo...

Menuda vergüenza... que si falta de compromiso, que si los jóvenes son muy cómodos... Me parece casi una falta de respeto el artículo en cuestión. Los jóvenes no es que tengan les falte compromiso sino que ya van sabiendo lo que se cuece en el mercado laboral. ¿Un puesto de mierda currando de sol a sol como un animal a 50 km de casa para que luego me den una palmadita en la espalda al acabar las prácticas?

Todavía creeréis que estáis haciendo una "función social" cuando lo único que hacéis es financiaros vuestro bmw nuevo con el trabajo de otro.

Anónimo dijo...

anónimo...

Gracias por tu aportación, en efecto si hablamos de empresas que utilizan las becas como trampa para cubrir puestos de responsabilidad con becarios estoy 100% de acuerdo contigo porque eso lo hemos sufrido todos los profesionales "maduros ".

A lo que me refería con mi post era sobre las empresas que ofrecen correctamente practicas a estudiantes ó recien titulados dando la posibilidad de integrarse al mercado laboral.No era mi intención generalizar..

Anónimo dijo...

anónimo 2..

Seguramente habrá empresas que abusen de estas herramientas pero de igual modo tampoco conviene generalizar.
Si lees detenidamente el post soy el primero en defender que las empresas deben acercarse a las motivaciones lógicas de la gente jovén para un beneficio mutuo.

Anónimo dijo...

Anónimo, es mejor que te quedes en casa "esperando" un puesto de "jefe"... así nadie te explota.

Los mejores no tienen problema para colocarse con sueldos dignos, lo que pasa es que hoy en día sobran licenciados y falta gente que quiera tragajar.

"He sido un hombre afortunado, en la vida nada me ha sido fácil" (Sigmund Freud)

Anónimo dijo...

Dioni, te has metido en un charco bueno...En cuanto vi el post estaba esperando en los comentarios lo de explotación, esclavos, de sol a sol, etc...

Yo también he sido becario (como dice Jose Antonio, hay pocas ofertas de Director General para un recién licenciado). En principio, sin remuneración. Aunque al final lo habitual era que la compañía te diera una pequeña cantidad de dinero. Y ahora colaboramos con un instituto de FP acogiendo becarios en su programa de prácticas, alguno de los cuales tiene ya un contrato laboral con nosotros, así que creo que algo conozco.

Un primer problema es que en cada promoción aprueban todas las asignaturas un número mínimo de alumnos (5 ó 6 de 30), con lo que el número de candidatos se reduce bastante.

Y otra cosa sobre compromiso, carrera y perspectivas de futuro: un técnico en informática nos dijo que prefería seguir haciendo horas como mozo de almacén que trabajar como programador para nosotros, ya que al tener nocturnidad, cobraba un poco más. Vivía con sus padres y no tenía problemas económicos. Pero sólo valoraba el presente, prefería los 80 euros extras de hoy a trabajar en lo que había estudiado y que probablemente le servía como inicio de una carrera profesional. Este caso me pareció tan sorprendente como revelador.

Como siempre, no es justo generalizar. Ni en las empresas ni en las personas. El curso pasado un chico realizó sus prácticas con nosotros, demostró todas las carencias propias de su inexperiencia (y del sistema educativo) pero las ganas que se suponen a alguién que quiere aprender y trabajar. Ahora está en nuestra plantilla (cobrando más de un 10% más de lo que marca el convenio y sus condiciones laborales).

Anónimo dijo...

otra opción es emprender claro ;)

es buenísima opción porque hay mucha demanda profesional y mercados de pymes sobre todo aún no cubiertos.

también oportunidades en crear startups web de alto rendimiento, incluso a nivel global.

y también porque realmente te dedicas a lo que más te gusta, aprender, curiosear, descubrir, compartir y estás a la última, un ritmo no posible nunca de comparar trabajando en ninguna empresa grande o pequeña pues la posibilidad de aprender lo último en tecnología está limitado a los proyectos.

para los rebeldes de los comentarios:
estoy con vosotros pero también hay que saber valorar muy bien el talento, no sólo el talento de la persona que quiere trabajar sino que tampoco se puede generalizar y hay empresas que realmente tienen talento como organizaciones.

por cierto tenemos un Garage30 en Vallecas para ese talento incontrolado ;) ya sea para vosotros u otras personas que conozcais y encima es libre...

Anónimo dijo...

ahora bien si lo que quereis son emociones fuertes... buscar una empresa startup, que esa si que cumplirá vuestras expectativas.

ventajas:
- divertidas, entorno de trabajo formidable.
- de reciente creación, posibilidades de realmente crecer.
- progreso en carrera profesional real, no tiene techo, nunca.
- y de alto crecimiento.

yo tuve la gran suerte de trabajar en algunas de ellas y al final me hice emprendedor, es lo que tiene ;)

Anónimo dijo...

A Rafa

Hemos hablado en alguna ocasión de esto. Exactamente. No es bueno generalizar. LAs anécdotas se acaban conviertiendo en demagogia.

Pero realmente creo que las prácticas o las becas son una herramienta excelente. Es cierto que con el cambio de valores, las empresas deben de gestionar la nueva realidad y por supuesto los jovenes deben adaptarse al entorno empresarial que les toca.

a Raul:

Estas como una moto. Eso es bueno. Por cierto, ¿Garage 30 admite personal en prácticas? ;)

Anónimo dijo...

Claro Dioni aquí son todo prácticas! ¿dime una cosa en que garage has visto becarios? otra cosa bien distinta son universitarios que vengan a Garage30 como emprendedores de una startup ;)

lo mejor de las prácticas es que sirvan para resolver algo, aquí en Garage30 pensamos que internet se esta re-descubriendo, ahora.

Anónimo dijo...

Buenas,

la verdad es que estaba impresionado por lo que estaba leyendo hasta leer la actualización del artículo.

Me alegra leer eso, pues desde mi punto de vista es INTOLERABLE que haya empresas (que las hay) que puedan nutrirse de becarios y gente en prácticas (muchos sin cobrar) para desarrollar actividades que corresponden a profesionales.

Cualquier trabajo desempeñado por cualquier persona, sea cual sea su cualificación, el desempeño del cual provoque un beneficio a una empresa, debe ser correspondientemente remunerado, de lo contrario eso tiene un nombre, y se llama esclavitud.

En la mano de la empresa está seleccionar al profesional con el perfil adecuado para que se esfuerce en el desempeño de su labor y para eso está el periodo de pruebas.

Anónimo dijo...

A blogelectrónica.

Creo que la aclaración es adecuada, pero insisto en un tema importante. Hablamos de Prácticas en Empresas, de Becas. No hablamos de empresas que buscan becarios para hacer trabajos de profesionales y saltarse así la filosofía de la beca.

De la misma forma insisto en pensar que una buena beca, en una empresa interesante, con las condiciones establecidas, es una excelente oportunidad. Y si está a 40 km de tu casa, pues no le veo el inconveniente. El beneficio tiene que ser mutuo, pero quien algo quiere, algo le costará.
Gracias por tu opinion