¿Retener o liberar el talento?
Durante estas semanas he tenido ocasión de volver a escuchar a los "responsables de RRHH(con perdón)", las mágicas palabras de "Nuestro objetivo sigue siendo retener el talento en la organización". Craso error, pocas miras de innovación real.
Es una canción que suena a rallada, a malgastada y probablemente a excusa de interminables programas internos de muchas empresas para justificar una política de personal que está totalmente desfasada, pero en la que estos responsables, con toda su buena intención, siguen creyendo de corazón. Pero que creo absolutamente necesario cambiar.
Después de un tiempo de reflexión, del que he sido creyente de esto de la retención del talento, soy un auténtico convencido de la liberalización del talento, ya comentado en 2007 por Julen. No es posible que un talento (por cierto, ¿Qué entendemos por talento? ¿Qué entienden las empresas por talento?) retenido en la organización, rodeado de barreras y a las puertas de las mazmorras, sea una persona que se encuentre motivada, simplemente porque está retenido y probablemente bien tratado. ¿Son esas sus motivaciones?. Lo dudo.
Nos hemos empeñado en retener el talento, aislándolo del resto de las personas, y premiándolo con absurdos programas de premios a las mejores ideas. Pero, ¿Y el impacto de esas ideas? ¿ Y la propiedad de esas ideas?. En eso no habíamos pensado, ¿no?
Ahora, con la Red como protagonista, las ideas deben de fluir, deben de estar liberadas, compartidas y mejoradas. Es la única forma de motivar a las personas con talento: que descubran su potencial sin ningún límite, que lideren los cambios, las ideas, sus propuestas. Que sean propietarios de una parte del pastel, que fluyan y recorran la organización y la sociedad. Que sean puente de unión de proyectos, ideas y opiniones. Que vivan fuera y dentro de la organización y se relacionen con otras redes, otras empresas, porque su talento se enriquecerá y retornará más fuerte aún.
El talento es libre, reteniéndolo sólo se consigue aplazar lo inevitable: Que la persona lo libere en otra organización, en otra red y entonces, sólo entonces, te preguntarás si los índices de rotación sirven para algo o deberían de estar ponderados.....
Foto vista en: www.innovacionempresarial.org
1 Comentario:
El gran problema es que para reconocer el talento hay que tener talento.
Saludos.
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